BRIDGES. Julio Rojas. Nueva York. 2009.

jueves, 11 de noviembre de 2010

SECRETOS COMPARTIDOS

PRIME
2005
Dirección: Ben Younger
Guión: Ben Younger
Música: Ryan Shore
Fotografía: William Rexer
Reparto: Meryl Streep, Uma Thurman, Bryan Greenberg, Jon Abrahams, Adriana Biasi, David Younger, Palmer Brown, Zak Orth
Premios:
Género: Comedia Romántica
Localizaciones: Central Park (Cherry Hill)
Greenwich Village (Cinema Village - 22 East 12th St con 5th Av; Panadería - 401 Bleeker St con West 11th St; Tompkins Square Park; Sushi Mambo, 255 Bleecker Street and Cornelia Street; Crate and Barrel Store, 611 Broadway and West Houston Street)
Soho (Apartamento de Rafi - Prince St con Lafayette St; Dean & Deluca, 560 Broadway and Prince Street)
Chelsea (Robert Miller Gallery, 524 West 26th Street and 10th Avenue; Marquee Nightclub, 289 10th Avenue and West 26th Street)
Little Italy (Prune Restaurant, 54 East 1st Street and 1st Avenue; Il Buco Restaurant, 47 Bond Street and Bowery)
Sinopsis: Rafi (Uma Thurman), es una mujer de 37 años, divorciada, que vive en Manhattan. Su vida da un giro cuando un joven pintor de 23 años se enamora de ella. A pesar de la atracción que siente hacia el joven, la diferencia de edad provoca dudas en Rafi, que busca consejo en la consulta de su psicoanalista Lisa (Meryl Streep). Lisa apoya a Rafi en su nuevo amor, pero todo cambia cuando descubre que el novio de Rafi es su hijo Dave (Bryan Greensberg). Lisa hará todo lo posible para, sin contarle la verdad a Rafi, romper la pareja de Dave y Rafi.

Crítica:
Amar, aprender y continuar...

Secretos Compartidos es una sutil y realista comedia romántica que consigue lo que muchas en nuestro tiempo no lo hacen: entretener a la vez que divertir a la vez que emocionar. Para ello se aleja de los lugares comunes de este tipo de cintas, renuncia a tópicos y clichés del genero, como el echo de que todos los personajes femeninos sean histriónicos y los masculinos planos.

Secretos Compartidos esconde mucho más de lo que enseña, por lo que bien podría ser una suerte de Annie Hall del siglo XXI, por varias razones (las digo antes que los fanáticos de Woody Allen o los que no hayan visto la cinta se me hechen encima): su análisis sincero y realista de la pareja de nuestros días es sencillamente perfecto, por el recorrido que lleva la relación y el propio recorrido personal de sus protagonistas, en todo momento humanos.

Esto lo consigue un estupendo guión del propio director, en el que tanto las situaciones como los propios personajes encajan a la perfección en la vida real. También es obra del director una estupenda dirección, que consigue innovar en un genero tan encorsetado como la comedia romántica, al conseguir con su cámara enseñar las emociones de sus protagonistas a través de repentinos y recurrentes planos detalle que ejercen un papel hipnótico con el espectador.

Así mismo, el introducir nuevas emociones en el género como un ligero toque amargo (como también ocurre en La Joya de la Familia o Separados) juega también a su favor.

Pero evidentemente lo que destaca de este filme es la forma en que los actores afrontan sus personajes, y eso se nota en el cariño que les tienen al interpretarlos, probablemente porque estos son seres de carne y hueso, maduros, que viven situaciones que todos hemos vivido alguna vez. Uma Thurman encaja a la perfección en su papel de mujer que al borde de los cuarenta se ve abocada a una crisis emocional de la que le salva el amor de un joven, que le hace de nuevo rejuvenecer. Su interopretación es sentida, creible y emocionante. Meryl Streep hace una de sus pocas incursiones en la comedia con el papel de Psicoanalista de Thurman, y las escenas más cómicas recaen principalmente en ella, pero como buena actirz que es, consigue introducir en su personaje emociones en forma de matices que nos dejan ver la mujer que es o el amor que le profesa a su hijo. Y el casi debutante Bryan Greenberg consigue superar un reto que a todas luces puede parecer imposible. Dejarse ver, y no solo eso, convencer y emocionar, entre dos titanes de la interpretación como son Thurman y Streep. Su papel lo resuelve con convinción y naturalidad, destaca tanto en las escenas con su madre como en las que tiene con su amante. Consigue ser divertido, elegante, pequeño o adulto.

Tres magnificas interpretaciones servidas en bandeja de oro en un filme que hubiera merecido mayor atención.

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